Ajuste de anillo de enfoque.

Imagen proyectada sobre la pantalla de enfoque prevista para
reajustar el sistema de enfoque de la cámara.
Después de una reparación o simplemente de una limpieza de la lente de una cámara, en la que implique desarmar el objetivo (separar los dos cuerpos que lo forman, frontal y posterior), una vez vuelto a montar en la cámara, es recomendable reajustar el anillo de enfoque, ya que es muy probable, que la posición relativa entre las lentes y el anillo de enfoque, haya quedado alterada y eso produce que las imágenes queden desenfocadas, al ser impresionadas sobre la película.

Para revisarlo, deberemos contar con una pantalla de enfoque y una lente de gran aumento. La pantalla, la situamos en el lugar por dónde desliza la película dentro de la cámara, pero no si antes, comprobar que la superficie matizada de la pantalla, quede perfectamente asentada sobre los raíles y exactamente a la misma altura, que si de la película se tratase.
Una vez realizada esta comprobación, que es el paso más importante de todo el proceso, colocaremos una lente de gran aumento (un buen contador de hilos, nos puede servir) sobre la cara pulida de la pantalla de enfoque.

Seleccionaremos la posición B (bulb) del obturador y con la ayuda de un cable disparador, con tornillo de retención, mantendremos abierto el obturador durante todo el proceso de ajuste.

Escogeremos la mayor apertura que nos permita el diafragma, para reducir a máximo la profundidad de campo y permitir la entrada de la máxima cantidad de luz.

Situaremos la cámara sobre un trípode y la dirigiremos hacia un objeto muy lejano, por ejemplo sobre unos 100 o 200 metros. Posicionando el anillo de enfoque en su posición de infinito y mirando a través de la lupa que hemos preparado, debemos comprobar la nitidez de la imagen, o el confrontameniento de las imágenes, en el sistema de imagen partida (en el caso de que lo posea la pantalla de enfoque que hemos elegido para el proceso).

Si la imagen no está perfectamente nítida, debemos actuar sobre la posición del anillo de ajuste, aflojando previamente los tornillos que lo sujetan al objetivo y que nos van a permitir, poder girarlo y variar la posición relativa entre éste y la lente.

Una vez ajustado, volvemos a apretar los tornillos de retención y hemos terminado el proceso.